Triple crimen: las cámaras mostraron a Lamonega con el vehículo de Santos

Fue el 23 de noviembre, el mismo día en que fueron asesinados Marisa Santos y sos hijos adolescentes, Lucas y Victoria Ramis. Además se presentaron nueve testigos. Algunos de ellos vieron al imputado por las calles de la ciudad.

24 NOV 2015 - 22:01 | Actualizado

En la quinta jornada del juicio contra Claudio Lamonega por el triple crimen de Sarmiento, se proyectaron distintos fragmentos de cámaras de seguridad de tres locales comerciales y el Banco de la Nación Argentina.

En ellas se observa al sospechoso conduciendo la Renault Kangoo de Marisa Santos, el domingo 23 de noviembre, entre las 9.56 y las 10.18. Asimismo, aproximadamente 45 minutos después, fue filmado bordo de su camioneta Chevrolet, color blanca circulando por la calle Uruguay, atravesando Perito Moreno y doblando a la derecha, al llegar a la intersección con Rivadavia.

Una de las testigos- que se domicilia sobre la calle Perito Moreno, antes de la intersección con Uruguay-, indicó que vio el vehículo de la víctima, estacionado en la esquina de su casa, el domingo 23 cuando concurrió a misa, antes de las 10.30.

Para el jueves, las partes y el tribunal, realizarán un recorrido por los diversos lugares, donde algunos testigos observaron a Lamonega, hace un año atrás.

Nueve testigos

Nueve testimonios se escucharon en el quinto día del juicio oral y público, por los tres crímenes ocurridos el día 23 de noviembre de 2014, en el domicilio ubicado en calle Sarmiento N° 445, entre las 3.25 y las 9.50, en circunstancias en que Marisa Santos y sus hijos, Lucas y Victoria Ramis, se encontraban durmiendo, cada uno en sus habitaciones.

El primer declarante detalló ante el tribunal las diferentes intervenciones que realizó, como testigo de actuación. El segundo testimonio correspondió a una empleada policial, quien explicó su intervención en el lugar donde fue hallada la camioneta de Marisa y en la casa de las víctimas.

Otro testigo, confirmó que ese domingo, en horario cercano a las 10.30, estacionó su vehículo en inmediaciones de una farmacia ubicada sobre calle Uruguay entre España y Avenida San Martín y observó la camioneta Kangoo, cuando era estacionada por Lamonega.

En este contexto agregó que se saludaron levantando la mano. Luego vio al imputado ingresar a un kiosco, y salir con el ejemplar de un diario bajo el brazo.

Dos mujeres

También testificaron dos mujeres -madre e hija- que se domicilian sobre la calle Perito Moreno entre Uruguay y Alberdi, frente a la Escuela Provincial N° 82.

Ambas confirmaron que no tienen vecinos en la cuadra. Sostuvieron que no es frecuente que estacionen automóviles en la calle durante los fines de semana y días feriados.

Una de las testimoniantes, indicó que el domingo 23 las 3.30 salió de su casa y acudió a un local nocturno, para ir a bailar. Regresó aproximadamente a las 7 y no vio ningún automóvil estacionado en la calle de su domicilio.

En tanto, su madre sostuvo que concurrió a misa el domingo 23, alrededor de las 10.30 y el rodado ya se encontraba aparcado en la esquina. Por último, brindó su testimonio un empleado de comercio que atendió a Claudio Lamonega el domingo por la noche, cuando concurrió a un mercado y adquirió diversos elementos.

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24 NOV 2015 - 22:01

En la quinta jornada del juicio contra Claudio Lamonega por el triple crimen de Sarmiento, se proyectaron distintos fragmentos de cámaras de seguridad de tres locales comerciales y el Banco de la Nación Argentina.

En ellas se observa al sospechoso conduciendo la Renault Kangoo de Marisa Santos, el domingo 23 de noviembre, entre las 9.56 y las 10.18. Asimismo, aproximadamente 45 minutos después, fue filmado bordo de su camioneta Chevrolet, color blanca circulando por la calle Uruguay, atravesando Perito Moreno y doblando a la derecha, al llegar a la intersección con Rivadavia.

Una de las testigos- que se domicilia sobre la calle Perito Moreno, antes de la intersección con Uruguay-, indicó que vio el vehículo de la víctima, estacionado en la esquina de su casa, el domingo 23 cuando concurrió a misa, antes de las 10.30.

Para el jueves, las partes y el tribunal, realizarán un recorrido por los diversos lugares, donde algunos testigos observaron a Lamonega, hace un año atrás.

Nueve testigos

Nueve testimonios se escucharon en el quinto día del juicio oral y público, por los tres crímenes ocurridos el día 23 de noviembre de 2014, en el domicilio ubicado en calle Sarmiento N° 445, entre las 3.25 y las 9.50, en circunstancias en que Marisa Santos y sus hijos, Lucas y Victoria Ramis, se encontraban durmiendo, cada uno en sus habitaciones.

El primer declarante detalló ante el tribunal las diferentes intervenciones que realizó, como testigo de actuación. El segundo testimonio correspondió a una empleada policial, quien explicó su intervención en el lugar donde fue hallada la camioneta de Marisa y en la casa de las víctimas.

Otro testigo, confirmó que ese domingo, en horario cercano a las 10.30, estacionó su vehículo en inmediaciones de una farmacia ubicada sobre calle Uruguay entre España y Avenida San Martín y observó la camioneta Kangoo, cuando era estacionada por Lamonega.

En este contexto agregó que se saludaron levantando la mano. Luego vio al imputado ingresar a un kiosco, y salir con el ejemplar de un diario bajo el brazo.

Dos mujeres

También testificaron dos mujeres -madre e hija- que se domicilian sobre la calle Perito Moreno entre Uruguay y Alberdi, frente a la Escuela Provincial N° 82.

Ambas confirmaron que no tienen vecinos en la cuadra. Sostuvieron que no es frecuente que estacionen automóviles en la calle durante los fines de semana y días feriados.

Una de las testimoniantes, indicó que el domingo 23 las 3.30 salió de su casa y acudió a un local nocturno, para ir a bailar. Regresó aproximadamente a las 7 y no vio ningún automóvil estacionado en la calle de su domicilio.

En tanto, su madre sostuvo que concurrió a misa el domingo 23, alrededor de las 10.30 y el rodado ya se encontraba aparcado en la esquina. Por último, brindó su testimonio un empleado de comercio que atendió a Claudio Lamonega el domingo por la noche, cuando concurrió a un mercado y adquirió diversos elementos.


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